martes, 6 de marzo de 2012

Plan B: Eliminar al candidato

La táctica del magnicidio sigue siendo el "As" bajo la manga para la oposición

Lo que ha sucedido en Venezuela desde inicios del año pasado hasta lo que va de 2012 pareciese seguir milimétricamente un plan definido para la toma del poder por parte de la oposición el próximo 7 de octubre en las elecciones a Presidente de la República. Se han logrado deslastrar a nivel mediático e internacional de sus razgos más perjudiciales y lucen un aura de transparencia democrática lejana al golpismo y a las prácticas desestabilizadoras de siempre. Esto es lo que proyectan mediáticamente a pesar que la realidad tangible es otra. Esta imagen es la que se maneja a nivel internacional como “verdad” del devenir político venezolano. Recuerden que la oposición es maestra en parecer, más no ser.

Se suponía que la avalancha de los tres millones de votos en las “Primarias de la Unidad” fungiría como el catalizador que encendería la motivación avasallante de los indecisos, pero nada que ver. Luego meten el ingrediente del “Progreso” que tendería a seducir y enamorar a una gran tajada del sector chavista insatisfecho. Todo esto se adiciona a la hegemonía mediática que catapulta al candidato al “Top Ten” de la palestra política. Factores más, factores menos pero el líder sigue pasmado y no “levanta”. Lo peor es que el contrincante, enfermo y ausente físicamente, sigue pautando la agenda comunicacional y le resta centimetraje al candidato pop.

Los números no cuadran, se ha seguido el guión al pie de la letra pero los resultados no son los esperados. El candidato “demoledor” que no confronta ni explica lo que hará, sólo fortalece la conexión empática con aquellos que lo ven no como un líder sino como la antítesis automática de Chávez. Por lo visto solucionar el problema de la “unidad” sólo fue un trámite a lo interno que no logra enganchar a nadie en la calle. La desesperación empieza a hacer mella, mucho dinero en juego y los financistas quieren ver resultados. El capitalista que financia una campaña política necesita que su inversión sea rentable, no es momento de ideologías, no es momento ni de izquierda ni de derecha, es momento de que los números revelen que el ungido por la unidad se cotiza más que el enfermo. Para ello añaden, casualmente en Cotiza, los ingredientes del show mediático. Disparos van y vienen, no importa quién los hizo, lo importante es que fue durante una marcha pacífica del candidato que vencerá al “dictador”. Se repite “¡Atentado!” una y otra vez. Los medios se encargan de sembrar esa idea, para eso está la “Libertad de Expresión”.

Pero resulta que tanta levadura no ha provocado el más mínimo ascenso en el favoritismo popular por el “progresista”. La cosa preocupa, más aún, porque el cogollo de la oposición ve que las argucias políticas y mediáticas ya no engañan. Sigue habiendo riñas internas en la MUD, diferentes visiones que pronostican diferentes desenlaces. Una derrota aplastante 70% Chávez a 30% Capriles es un “lujo” que no se puede dar la oposición. El sector golpista y desestabilizador sigue engranado sólo esperando el momento preciso. Ellos saben que lo hecho hasta ahora es pura mampara que no ha dado resultados. Se extrema la táctica y el método se vuelve inimaginable.

El tiempo se acaba y el 07 de octubre está a la vuelta de la esquina. Se necesita un choque mediático que impacte al corazón de la sociedad venezolana. No se puede sólo depender de la convalecencia del líder. Desestabilizar es la consigna. Nada mejor que un acontecimiento que deje a la oposición como víctimas del “tirano” que, aterrado, se aferra al poder por todos los medios posibles. La jauría mediática nacional e internacional está esperando. Quizá también, el “derrotado” de Allup, espera por la revancha para aplicar el Plan B: Eliminar al candidato.

Ya lo vimos en abril de 2002: sacrificar a los propios para junto a los medios crear el teatro, la desestabilización y el caos. En río revuelto, ganancia de pescadores dicen. Habrá que esperar para ver el curso que tomará el río. Con la oposición lo único seguro, es el juego sucio.

2 comentarios:

  1. Extraordinario análisis. Para la población general en Venezuela,para los seguidores del Comandante,es muy importante tener en cuenta los posibles escenarios que podrían presentarse.
    Hay que ser multiplicador de los logros de la revolución,ser pregoneros de la paz y la democracia.
    No dejarse provocar y defender el proceso bolivariano con argumentos

    ResponderEliminar
  2. Para nosotros, descendientes de una casta aguerrida, criados y orientados con principios Bolivarianos, en donde la Traición y la deslealtad es un crimen, seres que creemos en la democracia, que podemos tener una visiones distinta hasta diferente, confrontamos por defender nuestras posiciones y criterios, aceptamos con armonía cuando nos demuestran que nuestra ciencias es la errada; pero de allí a pensar en un Magnicidio, no encaja en nuestra naturaleza; Es una forma cobarde y rastrera de imponer una forma de hacer política, no la aceptamos por inmoral, hay que dar la cara y demostrar o tratar de convencer, pero ese camino para ellos es el mas corto, pero estoy seguro que no les podrá dar resultado, no tienen esa fuerza que da un pueblo.

    ResponderEliminar