Ridiculización del concepto de patria en plena vía pública |
En
estos días al caminar frente a un restaurante ubicado en el CELARG
de nombre “La Patana” me percato que en la acera de en frente hay
un graffiti que dice “NO tenemos Patria”. Para los que no sepan a
pocos metros en esa misma zona residencial está ubicada la plaza
Altamira, conocida por todos los venezolanos como territorio de la
ultraderecha opositora en Caracas. Me causó bastante impresión y
tristeza lo escrito en la pared porque denota una línea política
tendiente a destruir y socavar el espíritu de identidad nacional que
existe en el país.
Pinta de calle que anuncia "No tenemos patria" |
Todos hemos visto como la oposición y sus seguidores, con el más claro sentido de antipatriotismo hacen burla de las palabras de Hugo Chávez “Hoy tenemos Patria... bajo cualquier circunstancia tendremos Patria” ridiculizando esta afirmación magistral con los problemas y dificultades que como país experimentamos. Esto es parte de las operaciones sicológicas que tienen como prioridad el destruir cualquier sentido de pertenencia que los habitantes de un país puedan tener con el suelo en donde nacieron y que, casualmente, es uno de los logros más significativos de la Revolución Bolivariana: el retomar las raíces y nuestros orígenes como nación, saber de dónde venimos y qué somos.
Este
sentido de antipatriotismo, contrario al interés nacional y carente
de cualquier lógica nacionalista ha calado en grandes sectores del
país a través de un proceso paulatino de modificación de
conciencias y marcos de referencia socio políticos. Hoy por hoy la
oposición se maneja con base a mitos que no son más que
concepciones de la vida carentes de razón. Como bien lo dijo el
historiador Loren Baritz “los mitos no ceden ante los hechos. Yacen
debajo de la superficie, alojados en el torrente sanguíneo más que
en la mente”. Es por eso que para muchos es casi imposible
“razonar” al intentar debatir con un opositor. Sus creencias y
convicciones responden a un largo proceso de manufactura de una
percepción distorsionada respaldada por una realidad inexistente.
Carecen completamente, o casi en su totalidad, de lo que se denomina
introspección y autocrítica.
A
raíz de esto vemos a venezolanos que en su ignorancia se alegran al
afirmar que “no hay patria” porque resulta que la patria es un
“logro del chavismo” y como tal, debe ser negado y revertido
cueste lo que cueste. Vemos a estudiantes marchando contra la
“dictadura”, contra la “amenaza a la libertad de expresión”,
para evitar la “cubanización de la educación” y demás
disparates mediáticamente inoculados. Los escuchamos con convicción
y sin titubeo argumentar los mismos mitos y miedos desde hace 14
años. Siempre es lo mismo, no modifican su pensar ni su visión. Se
creen “a la moda” y en la “cresta de la ola” por repetir el
sentir de los burgueses que admiran y a cuyo estatus anhelan llegar.
La
Revolución Bolivariana y Socialista no debe cesar. El proceso debe
avanzar en la consolidación de la Patria a través de la promoción
de valores nacionalistas e identidad apegada a lo venezolano, a lo
nuestro. Si los habitantes de un territorio no sienten apego hacia
éste, no lo defenderán en el caso de una agresión. Al estimular en
los venezolanos el odio hacia su patria pareciese que la oposición y
los medios de derecha en Venezuela configuran lentamente al ejército
de Jenízaros caribeños que tendrán como fin destruir a la Patria
de Bolívar. Ser antipatria para ellos no es condenable sino algo
“cool”.
Estimado lector, a continuación encontrará imágenes recientes de una marcha opositora cuyas pancartas y avisos enuncian argumentos similares a los esgrimidos durante 14 años, curiosamente sin hechos que los constaten. Siempre hay una amenaza constante y permanente, una amenaza "castrocomunista" que jamás se materializa. Pero el miedo a la amenaza inexistente es lo que los sigue motivando. En el video habla un estudiante con convicción plena y seguridad de lo que dice (lo que plantea es ilógico y carece de sustento pero igual se aferra a ello).
VIDEO
FOTOS
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