Se venden culos y tetas

"Se venden culos"

Si usted cree que el título de esta nota es grosero y soez, pues déjeme decirle que no se ha pasado por los expendios de prensa escrita en Venezuela donde la figura femenina es explotada y utilizada como ardid publicitario para vender papel y lo que se pueda imprimir en él.

Siendo el país de la “misses”, la cultura mediática ha impuesto que la mujer y su cuerpo se asocie a cualquier producto, bien o servicio para vender más. No es sólo la televisión donde se promueve el estereotipo superfluo que le endilga a la mujer un rol estético donde unos senos “explotados” y un trasero perfecto son la garantía del éxito en todos los órdenes de la vida. En la prensa escrita también son expertos en utilizar a la mujer para vender.

Pero hasta allí no llega la cosa. Vemos vallas por doquier con mujeres "perfectas" que son imagen de bebidas alcohólicas. El monopolio de la Polar, ve repuntar sus ganancias en la medida que atrae a más consumidores hombres con el ardid publicitario que apela al cerebro límbico. Es que aquello de creer que se posee a una mujer buenota en el preciso momento que se agarra una cerveza, sólo puede ser ocurrencia de una asociación instintiva, carente de toda lógica racional. En este saco también cae, por supuesto, la Regional con su Diosa y slogans donde el doble sentido se luce.

Hay una gran diferencia entre la orientación artística al representar el cuerpo de la mujer, y aquellas que tienen un fin mercantil, de venta. Por ejemplo, no se puede comparar el propósito de la fotografía de Igor Amelkovich, especialista en desnudos femeninos, con la simpleza publicitaria a la que apelan diarios como “Líder en deportes” y “Meridiano”, que dedican su contraportada a la exposición de la fémina de turno, con muy poquita ropa, como para que el target de la publicación diga “soy bien macho porque hablo de deportes y me gustan los culos buenotes”.Se apela a los instintos para enganchar y vender.

Foto por Igor Amelkovich

No sólo Televen y demás medios audiovisuales deben frenar su dinámica neandertal de establecimiento de estereotipos machistas. Mucha de la música comercial, sobre todo, impone percepciones de vida que reducen a la mujer al nivel de “cosa”, despojándola de toda dignidad humana. Así como la revista “Urbe Bikini” coloca tres culos en portada para atraernos y vender, haciéndonos creer que tocaremos lo que vemos, muchas letras de canciones le dan al sexo femenino una bofetada en la cara, si de respeto hablamos.

A mí también me encanta la voluptuosidad de una mujer con curvas. Pero la mujer, debemos tenerlo en claro, es muchísimo más que eso.

La "Chica Líder"

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