domingo, 11 de diciembre de 2011

Chávez docente, “sabe más que un bacalao relleno”

Chávez siempre se esfuerza por explicar lo que se está haciendo en Venezuela
Escuchar a Chávez hablar es como sentarse a oír una clase magistral en una universidad. Seguramente saldrán algunos “ñángaras” a calificarme de jalamecate pero no, simplemente expreso lo que me genera al escuchar al líder de la revolución durante cada una de sus alocuciones televisivas. Son intervenciones netamente pedagógicas porque Hugo no dice lo que dice por decirlo y llenar un espacio, no habla por hablar. Cada una de sus frases van cargadas de instrucción, formación y de enseñanza. Su propósito más claro no puede ser: querer que el Pueblo comprenda la razón de lo que se está haciendo. El origen cultural, ideológico e histórico de las políticas implementadas hoy día.

Generar conciencia es su fin último. La conciencia despierta la voluntad del ser quien se siente motivado a emprender una acción, en este caso con orientación revolucionaria. Los discursos buscan formar al “Hombre nuevo”. Preparar intelectualmente a los oyentes y seguidores es su propósito para que así se sumen con corazón, alma e intelecto a la causa revolucionaria. Él está conciente que el cambio de paradigmas es necesario, el cambio de mentalidad, una nueva idiosincrasia, una nueva forma de entender lo que sucede a nuestro alrededor, una nueva manera de ver la realidad. Por eso él machaca continuamente que el estudio y la preparación debe ser permanente. La formación debe ser constante y ardua para despertar las mentes y generar nuevas ideas, una nueva teoría revolucionaria.

En cada aparición pública nos comenta bases ideológicas y antecedentes históricos. A veces uno mismo dice “Chávez sabe más que un bacalao relleno” porque el compendio de conocimientos, anécdotas, pasajes, citas, etc del que hace gala asombra hasta a los escuálidos más reaccionarios. Por eso ningún líder se le compara. Ni licuando a todos los candidatos de la oposición surge un contrincante que pueda dar la talla en un Debate. Hugo es eso, conocimiento al servicio del Pueblo para generar conciencia.

Pero entonces vemos que lo que hace el Presidente y Líder de la revolución contrasta con la política comunicacional del Gobierno Bolivariano. Revisando la Misión, Visión y Funciones del MinCI me doy cuenta de que por ninguna parte plantean “inducir al surgimiento del Hombre Nuevo”, mucho menos encontramos los verbos “formar”, “instruir” o “adoctrinar” respecto a los valores, ideología o doctrina socialista. Según plantean su fin último es mostrar la gestión de gobierno a través del Sistema Nacional de Medios Públicos (SNMP), pero curiosamente, no es sólo la promoción de la gestión de gobierno lo que se difunde.

Vemos infinidad de programas del SNMP que enfocan toda su artillería en atacar y desacreditar a los medios de oposición y a sus políticos contraatacando al sistema de medios de la derecha que disparan a la idea “socialismo” y a la persona “Hugo Chávez”. Vemos programas que embrujan visualmente pero no nutren intelectualmente. Es una Guerra Mediática porque, en efecto, los medios se ensañan contra sí mismos. La cosa no está en generar conciencia, el punto es mostrar lo malo y apátrida que es el medio opositor. En cambio, el medio opositor ataca la ideología socialista, la desvirtúa, la distorsiona, enreda, confunde y mete en ello a su máximo exponente: Hugo Chávez.

El MinCI debería asumir el rol de difusión ideológica que demanda la revolución bolivariana. Este trabajo lo pudiera hacer junto al Ministerio de Educación y el Ministerio del Poder Popular para la Cultura. La política comunicacional se diseña fácil, Chávez es el ejemplo de ella.

Soy socialista porque me dieron un televisor

¿Televisor socialista?
Hay gente que reclama contra la sociedad capitalista no porque se haya leído a Marx sino porque simplemente no le alcanza la plata para comprar todo lo que la televisión le enseña que debiera tener para ser feliz.”
                                          Jorge González (vocalista Los Prisioneros)

¿Por qué el pueblo venezolano apoya a la revolución bolivariana? ¿el pueblo venezolano conoce realmente lo que es el socialismo? Estas dos preguntas son clave para dilucidar el nivel de conciencia que los habitantes de Venezuela tienen respecto a los cambios sociopolíticos que tienen curso actualmente en nuestro país, un país signado por las desigualdades y en donde la diferenciación de clases sigue marcando las interacciones sociales.

Ciertamente, el porcentaje de la población que se ha politizado y le presta mayor atención al devenir de la política nacional ha aumentado exponencialmente en los últimos diez años. Hay un porcentaje mayor del pueblo involucrándose en el ejercicio del poder tal como lo establece la Constitución Nacional, por eso nuestra democracia es participativa y protagónica, por eso las iniciativas de organización social abundan en las comunidades, universidades, centros deportivos, trabajadores, etc., de eso nadie tiene la menor duda, la cosa es definir cuál es el porcentaje de la población que llega a este nivel de participación real, ¿será un 10 o 15% del total de la población? Esa cifra debería definirse.

Otra porción de la población apoya a Chávez y a la revolución sencillamente porque ha aumentado su poder adquisitivo y ahora puede comprar las cosas con las que antes soñaba. Ahora, gracias al Gobierno Bolivariano, pueden equipar sus casas con los productos imprescindibles para el buen vivir. Un buen vivir que no podría materializarse sin un televisor plasma de 42” que, según se afirma en la propaganda del programa “Mi Casa Bien Equipada” es para poder ver Aló Presidente los domingos. Lo que no dice la propaganda que habla del “confort” es que ese TV puede sintonizar también todos los canales y la programación basura alienante y capitalista que transmite venevisión, televen, globovision y la inmensidad de canales que se pueden obtener por suscripción. Tampoco dice que los niveles en consumo de electricidad aumentarán, cosa paradójica en un Gobierno que hace todos los esfuerzos por materilizar el ahorro energético.

Los conceptos y raíces de lo que significa la revolución se distorsionan. La revolución no es que haya televisores baratos, revolución es entender que un TV no puede ser una prioridad en un hogar por encima de la educación, la salud, la vivienda, la alimentación, etc. Es decir, pretendemos cambiar una sociedad distribuyendo herramientas que usa la Derecha para proteger y perpetuar el estatus quo. Revolución es conciencia y cambio de paradigmas, no satisfacción de todas las necesidades impuestas por el capitalismo para incrementar el consumismo y, por consiguiente, la rentabilidad del capital.

Entonces allí tenemos, un país con ciudadanos que apoyan a la revolución socialista, gracias a políticas acertadas que han cambiado su vida en materia de salud, educación, alimentación, etc pero también respaldada porque ha permitido el incremento del consumismo a su máxima expresión. ¿no me creen? Salgan a las calles y disfruten de “Gastiembre”, nombre que una amiga le colocó al mes de Diciembre por la característica hemorragia de dinero que se ve en la calles.

Gastemos, gastemos, gloria al gastador, feliz noche buena, feliz noche buena tenga el especulador!”

domingo, 4 de diciembre de 2011

El "ñángara" miope

Discurso de Vallenilla, digno de crucifixión de un lado y del otro


La cayapa internáutica desatada por la participación de Winston Vallenilla como animador en el concierto en el marco de la CELAC muestra nuevamente el “lado oscuro” tanto de los opositores autodenominados tolerantes y reconciliatorios, como de los autodenominados ñángaras, radicales, hiper ultra marxistas, reencarnación en vida del Che Guevara, es decir, de los chavistas que son más chavistas que el mismo Chávez.

Son lógicas las reacciones de un sector opositor que tiene más de fascista y reaccionario que los Camisas Negras italianos de comienzos del siglo XX. Una oposición irracional e indoblegable ante el hecho que uno de sus símbolos mediáticos o de la farándula errecetevera decidiera animar, por invitación del presidente Chávez (según él mismo lo relató), un evento trascendental escenario ideal para que los venezolanos unifiquen su criterio en torno a la política exterior del país que lleva el Gobierno Bolivariano que, casualmente, es liderado por un señor de apellido Chávez. Por supuesto que muchos opositores se enconan al escuchar las palabras de Vallenilla que dan visos de reflexión y sindéreses inusitadas, apoyando la iniciativa integracionista latinoamericana. Y es que, y acá viene mi pregunta ¿cuándo se ha visto a un escuálido brincar la talanquera para el otro lado? Bueno, allí está el meollo del asunto y que conste que el animador en cuestion dijo no ser chavista.


Del lado de los “altruistas” “guerrilleros” “revolucionarios” autodenominados “ñángaras” de los cuales dudo mucho alguno sepa usar un AK-47, empezó también la metralla destructiva tanto a su escogencia como presentador, así como a su figura. Los argumentos giraban en torno a que “hay gente preparada y comprometida en el lado de la revolución que puede animar”, “ponerlo allí es un insulto a la memoria y al sentido común”, “ese intento de sumar adeptos de oposición no funciona”, etc. Según sus planteamientos se desprende que todos aquellos actores, técnicos, empleados, productores, socios y demás de los medios de la derecha son crucificables. Lo peor de todo es que manifiestan sus opiniones sectarias sin descaro, y con más descaro aún te cuestionan si osas llamarlos sectarios. Supongo también querrán "fusilar" a Esteban Trapiello quien construyó parte de su carrera gracias a RCTV y hoy muestra innumerables vínculos con producciones audiovisuales y demás del Gobierno. A Simón Pestana también habría que execrarlo, porque tiene su corazón en la planta de La Campiña,¿no?

El adalid de la revolución con ADN mezclado de Sandino, Fidel, Bolívar, Hegel, Lenin, Trotski y Miranda no tiene la agudeza en su percepción y análisis político para darse cuenta que ser inclusivo, tolerante y abrir espacios a aquellos que en algún momento adversaron irracionalmente la causa del proceso revolucionario echa por tierra la matriz mediática de “la camisa tiene que ser roja”. Tampoco se les ocurre discernir que muchos opositores de esos cuya claridad ideológica es tan sólida como una gelatina, puedan preguntarse “¿y a este Winston qué le pasó?” produciéndose en ellos una chispa de reflexión que llame a la simpatía con el proceso o siquiera a autocuestionar su postura. Tesis más Antítesis es igual a Síntesis, fórmula básica que cualquier ique chavista radical debería comprender y usar antes de opinar.

Los autodenominados ñángaras son en muchos casos para el Proceso, lo mismo que un monitor monocromático a la era de los dispositivos LED. Los análisis básicos, sin profundidad, sectarios y excluyentes están desfasados. Revolución significa más que nada, cambio de paradigmas y acelerar contradicciones. Reaccionar como la derecha sólo muestra lo lejos que algunos “revolucionarios” están del ideario político bolivariano. ¿Un autodenominado ñángara será capaz de reflexión?

domingo, 13 de noviembre de 2011

“¡Qué arrechera que lo rescataron vivo!”

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Triste realidad


Reunión de pauta editorial en el canal del loguito amarillo (ejemplo hipotético)

Gerente de Producción: muy bien equipo, para hoy tenemos en caliente la noticia del secuestro del pelotero. Ya ustedes saben cómo actuamos nosotros en estos escenarios, necesito lo más trágico y desesperanzador en pantalla, declaraciones dudando de la eficacia de los cuerpos de seguridad, lo mal que se siente la gente en la calle por los secuestros, ineficiencia gubernamental, incompetencia de los cuerpos policiales, resalten que se arma al ejército pero no hay seguridad en el país, también que hay una guerra solapada y demás. Eso sí, que la gente señale como culpable a Chávez.
Esbirros: perfecto jefe! Cuente con eso!
Gerente de Producción: eso sí, ya yo hablé con el “master” para no andar metiendo sonidos ni “aliños” a las transmisiones. Miren que el jefe anda molesto por los reales que debe pagar y no quiere que eso se repita al menos que sea necesario.
Esbirros: entendido, claro como el agua.
Jefe: bueno, bueno, todos a trabajar y esperemos lo peor.


Cuando un canal de televisión se convierte en partido político, obvio que sus intereses se convierten en objetivos políticos. En política “todo se vale” según la ética del fascista. Ejercer la comunicación maquiavélicamente quiere decir que el fin justifica los medios, es decir, para hacer oposición y desprestigiar al gobierno se valen de lo que sea necesario. La desgracia ajena no es para tener consideración de ella ni tratar de consolarla, pues no, la desgracia ajena es para sacarle provecho, difundirla, usarla como arma para azuzar a la arrechera de la gente quienes deben señalar y culpar a quien ellos elijan, en todos los casos, Hugo Chávez Frías.

Ustedes los ven miopes ante las victorias deportivas, logros de la Vinotinto, hazañas como la de Maickel Melamed, etc. Eventos que tienen un bajísimo perfil en la parrilla de la programación diaria, semanal y mensual. Pongo éstos ejemplos porque podrían considerarse los de menos “color” político, dado que en cuanto a logros del Gobierno Bolivariano es común que brillen por su ausencia. Pero que no pase nada malo porque allí ven la cobertura noticiosa y periodística más increíble que se puedan imaginar. Opinadores expertísimos, sesudos analistas, científicos desconocidos que conocen muchísimo de lo que, por supuesto, el gobierno ignora a pesar de que ellos “están cansados de informárselo”. 

El crimen y la sangre en TV usado con fin político
 

Lo malo y vil los fortalece, lo bueno y positivo los debilita. Su línea editorial se traduce en “mostrar lo malo y diabólico que es Chávez y su comunismo tropical. Estamos en caos. Estamos desesperados. La audiencia debe entender y asumir que cualquier cosa es mejor que Chávez”. Cuando una línea editorial tiene como fin tumbar un gobierno los mensajes son considerados como balas o misiles que debilitan al adversario. No importa con qué se fabrican las balas, lo fundamental es que hagan daño.

Si hay 100 muertos en la morgue este fin de semana, pues no les interesa las causas por las que ingresaron. Lo importante es poner el número 100 en rojo sangre (chorreando) y si es posible rodeado por impactos de bala en la pantalla. Si hay un secuestro ligan para que sea de alguien importante y si es de un pelotero, sonríen como carajito con juguete nuevo esperando el peor desenlace. ¿No me lo creen? ¿A cuántos periodistas del canal vieron contentos, de verdad, por el rescate?¿Cuántos reportajes vieron reflejando la excelente actuación de los cuerpos de seguridad?

En fin, la comunicación necrofílica es la herramienta ideal para las tendencias fascistas: aquellas que promueven el caos con la promesa del orden, una y otra vez. ¿Será esto el mal necesario de la democracia participativa y protagónica venezolana? Veremos.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Descalificando a paso de vencedores!

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Enfocarse sólo en desacreditar, no genera conciencia.

En estos días estuve viendo televisión todo un día, evaluando lo que informaban ... a veces la cobertura televisiva de la diatriba política diaria impide que se muestren los avances de la Revolución”.
                                                                                                                 Hugo Chávez Frías

Cada día la vorágine comunicacional se traga a los medios del Estado. El Sistema Nacional de Medios Públicos, como ya lo he reiterado en anteriores oportunidades, está a merced de la comunicación intempestiva y carente de reflexión. El objetivo se centra en descalificar al adversario ridiculizándolo, mostrando sus contradicciones y haciendo mofa de lo que dice y lo alejado que se encuentra del Pueblo, cosa que no digo sea mentira pero invertir tantas horas de tantos medios, tanta creatividad y tanto recurso humano exclusivamente en reaccionar a la pauta que dicta la oposición y los medios de oposición es infructuoso en revolución. La pregunta lógica sería ¿para qué invertir tanto en desacreditar al otro? Y la respuesta obvia es: porque no quiero que crean en el contrario.

Centrarse en la diatriba política, tal como lo señala el Comandante Presidente Chávez, es enfocar la artillería mediática en un sólo punto de ataque: la Contrainformación que no es otra cosa que dar respuesta opuesta a la matriz informativa de quien me ataca. Por supuesto, la oposición mediática siempre lanzará el anzuelo de los rumores, de las medias verdades, de noticias no oficiales, etc. con el propósito de distraer y confundir. Más aún, cuando la prensa, radio y televisión de la derecha difunden mensajes lo hacen para estimular la decepción ante la revolución, la incredulidad y apatía ante la política junto con el firme propósito de combinar, mezclar, licuar y fundir las ideologías de modo que el referente conductual del espectador o audiencia se limite a consumir lo que se publicita en cada transmisión. No estamos en tiempos ni de izquierda ni de derecha, dicen repetidamente.

No es necesario machacar tanto lo malo que los otros son. No es correcto que sólo se muestre las razones para no creer en el adversario. Se deben mostrar las razones por las cuales debo creer en la revolución. Muestra los logros de la Revolución. Muestra cómo, poco a poco, nuestras comunidades han venido cambiando. Enseña las discusiones del día a día en los Consejos Comunales, en los sindicatos, entre los promotores del Gran Polo Patriótico, etc. Enseña el cambio conductual de aquellos hombres y mujeres que en sus comunidades quieren materializar al “hombre nuevo”. Motiva a querer ser diferente y a cambiar para mejor en esta sociedad consumista donde lo más importante es la apariencia y la cultura de la ostentación. Forma, instruye, brinda las herramientas para cambiar individualmente, generando conciencia en cada usuario, para luego irradiarla a su entorno.

Son tres frentes de batalla 1) la Contrainformación; 2) Difusión de la Gestión de Gobierno y 3) Educación y Socialización. La diatriba política, torbellino de hechos cotidianos, dimes y diretes de la política venezolana hacen que la mayoría de los esfuerzos sean para contrainformar. El mostrar lo que significa la Revolución Bolivariana en hechos palpables se ve opacado, eso sin contar con la escaza o nula educación, socialización y formación socialista de los receptores de mensajes a través del SNMP. Aún falta por revolucionar en comunicación. Aún falta por generar conciencia creadora a través de mensajes. Se ha avanzado, pero falta ajustar los objetivos y atacar los flancos descuidados.

¿Será que a alguien se le ocurrirá un proyecto como “Ideología TV”?

Comentario de última hora: iniciativas audiovisuales como la serie "Ver para Creer" de Vive TV y SAIME TV marcan el rumbo en formación audiovisual para la conciencia social de las masas. Excelente trabajo.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Pides cacao, eres cursi, fascista y quejoso


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Realmente que la política venezolana da para todo. Hoy por hoy tenemos a un candidato a las elecciones primarias de una mal llamada “Unidad” quien, a pesar de ir ganando holgadamente en las encuestas, empieza a demostrar flaqueza, debilidad, sumisión y subordinación a los politiqueros cuartorrepublicanos que siempre lo han pisoteado. Lo peor es que ese candidato no está sólo, sino que está apoyado por siete organizaciones políticas que respaldan sus aspiraciones a ser presidente del país, anhelo que día a día se aleja más de sus manos.

Inocentemente él afirma que es un “gran amigo” de su principal contendor, la cosa es que ese amigable contendor, quien también afirma ser su “alto pana”, no dudó en burlarse diciendo “Capriles fue a pedir cacao a Copei” ridiculizándolo frente a todas las cámaras y micrófonos de los medios del país. Peor aún, quien funge como estratega político y jefe de campaña de ese “amistoso contrincante” dice abiertamente a los medios de comunicación que el candidato es un “quejoso con un discurso cursi y fascista” disminuyéndolo políticamente a través del elocuente y soberbio desprecio cuartorrepublicano.

Como si esto fuera poco, se hacen “acuerdos fantasmas” y se “cambian las reglas” en una contienda que lo único que tiene de unitaria es la propaganda de la que hace gala. Pero el candidato del autobús, que de paso es robado, no atina a identificar que está metido en la boca del lobo y ya lo están masticando. Un bocadillo “plástico” creado con las herramientas de la “propaganda política más o menos costosa”, en pocas palabras un Político Pop que tiene nada de aguerrido y mucho de genuflexo. Lo que falta es que el titiretero de la oposición lo califique como un “busca la vida” más que cree que con lanzarse a presidente podrá capitalizar favores financieros suficientes para vivir tranquilo el resto de sus días.

Se va a quedar sin el chivo y sin el mecate. Sus seguidores, quienes engañados creen en él, se decepcionarán rápidamente ante su falta de dignidad. Sus “aliados” partidistas quizá, mucho antes de lo que crea, empezarán a coquetear con el candidato de “la maquinaria” dándole la espalda. Él dice y habla que las decisiones las toma el Pueblo que lo apoya, pero el guabineo y endeblez ante las arremetidas de las cúpulas adeco-copeyanas denotan todo lo contrario. Se está rindiendo políticamente y el ímpetu del “progreso” aunque sea como herramienta propagandística de campaña, no va de la mano con la vieja y rancia partidocracia que los venezolanos aborrecen. Su actuar debe ser cónsono con su discurso. El que busca el “progreso” debe romper las ataduras que evitan el avance, dejar atrás lo que no sirve porque de lo contrario queda anclado en el olvido. Eso de “yo acepto todos los apoyos” no aplica en estas circunstancias. La MUD es una trampa y el candidato está consciente de ello.

En una contienda no hay amigos, en una pelea de cuchillos no hay altos panas. En la “Unidad” manda la misma cúpula que destruyó al país y, al no tenerlo en sus manos, destruye hoy a la ciega oposición que sigue confiando en ella. Marcar un quiebre está a la vista. Diferenciarse del resto lo más fácil. ¿Por qué temer una ruptura trascendental que marcaría pauta, más aún cuando se tiene el viento a favor en las encuestas? El terror a la maquinaria es la única respuesta.

Además de pedir cacao, ser cursi, fascista y quejoso creo se le endilgará mucho más que antes el calificativo de cobarde y los cobardes no merecen la presidencia de ningún país.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

PAC-MAN es adeco

AD, así como PAC-MAN, no quiere dejar nada en el terreno

Ambición, traición, imposición y tradición, cuatro palabras que me vinieron a la mente en el momento que ví a Carlos Ocariz “indignado” en la rueda de prensa de Primero Justicia del 1ero de noviembre, y no precisamente por la medidas financieras que se implementan a lo largo y ancho del planeta. Esas cuatro palabras que se filtran por las rendijas de una Mesa de la Unidad agrietada y estillada que ya no soporta el peso del puntofijismo. Las cuatro palabras que dejaron al país en la desidia y abandono durante la democracia bipartidista. Palabras siempre presentes en la oposición y disimuladas a través de la propaganda de ocasión.

Pues sí señores, resulta que ahora a los opositores les extraña que surjan diferencias irreconciliables en la MUD cuando es una constante que las ambiciones personales, intereses particulares, anhelos partidistas y rebatiña por cuotas de poder destruyan siempre los supuestos aires de la etérea “unidad”. Primero Justicia se queja ahora por el “diseño de reglas ventajistas para unos y perjudiciales para otros” en el escenario de la MUD, se les aplicaría el dicho “después del ojo afuera no vale Santa Lucía” porque es ilógico que te metas en una jaula con lobos, donde las reglas las ponen los lobos y después adviertas lo injusto que es que te muerdan. Por lo visto carecen de agudeza política o son los politiqueros más inocentes de Venezuela.

Desde hace más de dos meses lo vengo diciendo, ¡las primarias no van! porque la esencia de la oposición es la traición, las ambiciones personales y el mantenimiento de las cuotas de poder. El concepto de “unidad” es algo irreal, propagandístico, demagógico y circunstancial. Las imposiciones de candidatos vendrán servidas en una mesa de la discordia caracterizada por el “quítate tú pa ponerme yo” o por un “acuerdo fantasma” como dicen los de Primero Justicia. El billete contante y sonante fluye por debajo de la mesa y nadie lo ve. A la final, el candidato a vencer es Henrique Capriles y eso lo saben muy bien tanto Acción Democrática como Un Nuevo Tiempo que no piensan ceder ni un milímetro al resto de fuerzas políticas de la oposición porque esto significaría perder espacios ya conquistados.

Allup es quien manda en la MUD, y esto lo entiende Pablo Pérez y UNT quienes ya cuadraron alianza con el dinosaurio cuartorrepublicano. Maria Corina sólo finge, hace teatro y cumple un rol más en la obra de la “Unidad” en la que ha ido colaborando sin armar mucho lío para, más adelante, pedir su tajada. Leopoldo López, una insignificante piedra en el zapato que podría ser excluído de las primarias por considerar su candidatura un fraude dado que no podrá ejercer ningún cargo en la Adminsitración Pública. Diego Arria, con una candidatura obviamente de farándula no merece mayor análisis porque se cuadrará con el que mejor “negocio” ofrezca. Pero, ¿cómo quitarse de encima a Capriles?

Pues bien, las triquiñuelas políticas son el fuerte de la alianza AD que hará uso de la experiencia y trayectoria que tiene en ello. Quizá destierren de la MUD a Capriles por insubordinado que no “respetó” el Reglamento. Quizá lo saquen por utilizar el tricolor nacional como estrategia de campaña política “Comando Tricolor” y el loguito de la bandera de Venezuela con letras “Hay Un Camino”, cosa que viola abiertamente el enunciado N° 49 en su punto “b” del Reglamento de Selección de Candidatos MUD. Veremos la estrategia que usarán.

Si yo fuera asesor de Capriles le recomendaría darle una patada a la Mesa recordando que el que pega primero, pega dos veces. Es preferible denunciar una falsa Unidad, apartándose y distanciándose de la vieja política de cogoyos puntofijista. Esto generaría improntación con el electorado de la oposición capitalizable en votos, más aún cuando las encuestas lo favorecen. Hacer lo contrario significaría sucumbir ante la voracidad de Acción Democrática que nunca saciará el hambre de poder político. Seguir como cordero sumiso marcará la perpetuidad de la genuflexión de los partidos de oposición al monstruo de AD, figura que como el protagonista del famoso juego de Atari, PAC-MAN, no quiere dejar nada para nadie en el terreno.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Recursos inHumanos

Esto no parece revolución del proletariado,¿o sí?

                                          “Lo único que crea nuevos valores es el trabajo humano”
                                                                                                             Che Guevara

Socialismo es sinónimo de humanismo. Eso lo entiende cualquier persona con lecturas básicas de textos revolucionarios y con una somera compresión de lo que significa un proceso de cambio como el venezolano. Ahora bien, de entender a asumir hay un largo trecho. El asumir implica comprensión y acción en función de un ideal. El asumir requiere internalizar un modelo, un patrón específico, un ejemplo y actuar en consecuencia. Como Chávez increpó recientemente en un Consejo de Ministros “¿Qué más hace falta?! Hace falta conciencia y voluntad!”, y el Comandante Presidente en esto no se equivoca, hace falta conciencia y voluntad para hacer cotidiano el socialismo humano en todas las estructuras organizativas del Estado. Revolución es cambio humanista, no perpetuidad reformista.

El que se sienta aludido con lo que acá expongo que se sincere y reflexione. Llevamos más de una década en revolución, pero seguimos viendo piezas clave en el motor del Estado que funcionan al ritmo de la vieja máquina. No digo que sean todas, pero aún las hay. Engranajes de cuarta en una máquina de quinta. Partes que deberían generar sinergia revolucionaria y no inercia reformista. El motor falla y su desempeño no es óptimo. El rendimiento en revoluciones por minuto es mediocre en algunos tramos. Las piezas clave saben que se quedan atrás y no van al ritmo del líder. Pero allí siguen, inertes, como rémoras mata votos que destruyen el proceso desde dentro. Gestionan a los individuos en función de un objetivo, conectan las capacidades de cada particular para en equipo alcanzar una meta. Administran el Recurso Humano pero, como no asumen el socialismo, mutan a Recursos in-humanos.

¿Cuántas veces no hemos dicho que se trata a los trabajadores de equis o ye organización peor que en la cuarta?¿cuántos miembros del proletariado aún luchan por derechos que en Revolución desde hace rato deberían estar garantizados? Las respuestas son obvias pero falta conciencia y voluntad. Puestos clave, directivos, que entienden pero no asumen el socialismo, por consiguiente, se manejan como el adeco más tradicional que hayamos visto en organismo público alguno y, como tal, actúan con saña y premeditación en contra de quien, a viva voz y acción, aporta su grano de maíz en la consolidación de la revolución. Son el enlace entre todos los trabajadores de la organización, pero se mueven y actúan a espaldas de ellos quienes rara vez, sino es que nunca, reciben respuesta oportuna a sus requerimientos, demandas o denuncias. El estrés laboral se expande como epidemia.

Son hábiles en cuidar su cambur, que depende de la forma como administren los cambures de todos los demás. Manejan las cuotas de poder. Proponen y ponen a su antojo, sancionan y remueven según les convenga. Muchos están allí no para hacer cumplir las leyes y dignificar al proletariado, sino para decir “Fulanito es nadie en el Despacho” con soberbia cuartorrepublicana y hacer gala e imponer una voluntad emanada de su autoridad que no es producto de una elección popular. Visión capitalista de las relaciones humanas. Ejecución inhumana de una responsabilidad humana.

Al sancionar, con razón o sin razón, jamás dan justificación. Sienten gran empatía por los funcionarios déspotas de su organización. Son disciplinados, pero a sus mismos intereses y le argumentan al sancionado “usted es un soldado de la revolución, y como tal debe acatar la decisión!”, claro está, si el empleado o trabajador pregunta el por qué, un silencio estruendoso invadirá la oficina, frío escenario de las más inhumanas y humillantes retaliaciones laborales.

Generar nuevos valores en las estructuras organizativas del Estado revolucionario pasa por tener piezas clave que no sólo entiendan sino que internalicen y asuman el ideal revolucionario de una gestión de los Recursos Humanos de forma humanista. La Revolución Bolivariana debe ser sinónimo de Revolución del proletariado transformando radicalmente las interacciones entre instancias directivas tradicionales de las estructuras organizativas y sus subordinados. Dignificar al trabajador. Ser honesto y sincero con el empleado. Más aún, formarlo e instruirlo para que internalice el ideal socialista. Irradiar revolución con el ejemplo. Mostrar conciencia y voluntad para cambiar.

Las piezas claves deben adaptarse a la nueva máquina o ser descartadas para dar paso a elementos compatibles con el nuevo estándar, de quinta generación. El gerente, director o jefe de Recursos Humanos debe hacerle honor al nombre de la instancia que dirige, de lo contrario, el prefijo “in” se incorporará en el vocabulario cotidiano de los empleados de su organización. Si no acciona para demostrar lo contrario pasará a llamarse “oficina de Recursos inHumanos”.

lunes, 17 de octubre de 2011

¿Qué es y para qué sirve la Ideología en la Revolución?

 


(Este artículo lo escribí en el 2004 pero mantiene su vigencia)

Si hablamos sobre el significado real del término revolución, nos daremos cuenta que plantea un cambio estructural en las formas de las relaciones sociales y de producción en nuestro país, por lo tanto, si se quiere que dicho cambio estructural se fortalezca, afiance y perpetúe en el tiempo a lo largo de la nueva historia que se está escribiendo en Venezuela, es primordial que la ideología revolucionaria se transmita, fomente e instruya al mayor número de ciudadanos pro-cambio, con miras a crear una conciencia colectiva que permita el fortalecimiento del proceso y le dé viabilidad a la propuesta de país plasmada en la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela.

Ahora bien, es necesario que todos los líderes y dirigentes entiendan la importancia que tiene el fomento de la ideología pre y post Referendo Presidencial, pues es falso aquello de que no hay tiempo para largas y complicadas teorías y que el fomento de la ideología puede ayudar un poco pero no mucho en el cambio de actitud de quienes con su comportamiento obstaculizan y entorpecen el proceso. Nada más lejos de la verdad.

Un líder revolucionario debe entender que hay una diferencia notoria entre los términos cultura e ideología y no sólo eso, sino que debe darse cuenta que la ideología forma parte de la cultura de un individuo y, por lo tanto, determina su accionar o comportamiento. La ideología es el conjunto de concepciones, sistema de ideas y representaciones, que domina el espíritu del hombre o un grupo social y la cultura es el conjunto de valores materiales y espirituales creados por la humanidad en el curso de la historia.

Aclarados estos términos, podemos responder con mayor facilidad a la pregunta ¿la ideología puede ayudar a fortalecer el proceso revolucionario?

Gran parte de quiénes apoyan al proceso revolucionario lo hacen siguiendo el liderazgo carismático de nuestro Presidente Hugo Chávez y porque se sienten identificados con las políticas de gobierno implementadas a lo largo de su mandato, ahora bien, el carácter de la ideología es tan importante en la actualidad porque aquellos que apoyan el proceso están ávidos y necesitados de conocer con profundidad de dónde viene, dónde se encuentra y hacia dónde se dirige nuestro país y, principalmente, qué es lo que significa la revolución y sobre qué bases se construye.

Si queremos cambiar la manera de pensar, las actitudes y la cultura del venezolano hacia una nueva percepción de lo que significa ser un ciudadano que piensa en comunidad y privilegia el colectivo, la instrucción ideológica es la única manera de hacerlo. Si se quiere un cambio social y un cambio de estructura, es necesario que cada revolucionario conozca y entienda lo que se quiere hacer en el país, es fundamental que asuma como suyo los ideales revolucionarios, hecho que elevará su convicción y compromiso para defender a nuestra patria.

Si se imparte ideología revolucionaria, se le brinda motivación a esa masa de compatriotas que apoyan al proceso pero no conocen a ciencia cierta qué es lo que significa, es más, si se imparte ideología, cada ciudadano podrá conocer el rumbo marcado para mejorar nuestro país e identificará la verdadera orientación que debe encausar el accionar de los demás revolucionarios, por ejemplo, si tenemos a un funcionario público que ejerce un cargo de elección popular, dice ser revolucionario, pero ninguna de sus acciones ha tendido a fortalecer la participación y transferir la toma de decisiones al colectivo, la ideología impartida a dicho colectivo lo convertirá en sujeto del cambio social porque exigirá la retoma del verdadero camino revolucionario y vigilará para que el rumbo se mantenga. Esta es la importancia de la ideología.

martes, 11 de octubre de 2011

Arroz con mango ideológico

Izq. Adam Smith, creador del Capitalismo, Der. Marx, creador del Marxismo/Comunismo

Hace rato leí un twitt de @mariacorina2011 en el que ella habla de “Capitalismo Popular” y lo define de la siguiente manera:

Capitalismo Popular: es oportunidad y superación para todos. Es una sociedad de propietarios,de emprendedores de trabajo digno;de esfuerzo y recompensa. Es confianza en ti mismo,en tu capacidad creadora, es valentía, respeto y solidaridad, porque compartiendo todos ganamos. Los buhoneros serán empresarios;los trabajadores contratados, empleados estables,los trabajadores accionistas.

¿Simpatizantes del Capitalismo Popular?
No voy hacer un tratado de lo incongruente de sus postulados, a fin de cuentas creo que mucha gente que reaccionó en el Twitter ridiculizándola está clara ideológicamente. Lo que yo voy a explicar acá es la razón y el por qué ella dice lo que dice.

Estando actualmente en plena campaña electoral, sobre todo los “capaces y preparados” de la oposición a través de la MU$ y sus majunches, es necesario definir el rumbo que seguirán las líneas discursivas de cada contendor. El problema acá, es que los candidatos de la oposición saben muy bien que ninguno de ellos, individualmente ni “uniéndose”, le llegan a los talones a Chávez en cuanto a popularidad según lo evidencian las últimas encuestas. En consecuencia, los estrategas del sector opositor reconocen que es gastar pólvora en zamuro el querer posicionar a un liderazgo “X” por encima del contendor principal Chávez y recurren a la batalla ideológica o de las ideas para diferenciar las opciones: 1) Socialismo contra, 2) “cualquier cosa con la que podamos engañar y atraer a la gente desprevenida que no tiene claridad ideológica”. La lucha para ellos es de MODELOS no de LIDERAZGOS.

Con lo anterior quiero decir que el sector oposición está plenamente consciente, me refiero a los estrategas de la campaña, de los disparates conceptuales y barbarismos que los “líderes” deben decirle a la gente, al Pueblo pues. Su estrategia de campaña gira en torno a generar confusión y atraer al más desprevenido. Por esto es que veremos enunciados conceptuales como:
  • Neoliberalismo solidario.
  • Privatización socializadora.
  • Representatividad protagónica y participativa.
  • Capitalismo solidario (que en días pasados lo anunciara Pérez Vivas).
  • Neoliberalismo desde las bases.
  • Individualismo colectivista.
  • Justicia especulativa.
  • Elitismo inclusivo.
  • Desigualdad equilibrada.
  • Conciencia Social de la clase dominante.
  • Competitividad solidaria.
  • Imperialismo distributivo libertario y justo.
Hablar por hablar, decir por decir sin importar la lógica de lo que se plantea será el eje de la campaña de la MU$. El discurso e identificación ideológica con el capitalismo no lo pueden esconder, es por ello que tratan de suavizar su significación con accesorios conceptuales antagónicos pero que, a fin de cuenta, pudiesen generar confusión en los que no tienen claridad ideológica.

La batalla es de ideas. La batalla es la confrontación de dos modelos. La guerra es ideológica y que cada quien asuma el modelo y las ideas que menos miedo o conflicto interno le genere. Confundir, engañar y enredar es el fin último que persigue la oposición porque ellos están en contra de que el Pueblo de Venezuela siga madurando políticamente.

La formación ideológica socialista es fundamental en esta etapa. Sólo así podremos ser capaces de evitar que barbaridades como las dichas por Maria Machado calen o generen duda entre el Pueblo desprevenido.

Lo que para muchos significa brutalidad y da risa, para otros puede sonar inteligente, atractivo y serio. El "Capitalismo Popular" no se debe razonar, debe sonar bonito y se debe sentir. ¡Mosca con eso!

lunes, 10 de octubre de 2011

Escenario electoral 2012 – MUD, ¿saco de los “más capaces”?

Una imagen dice más que mil palabras

La Mesa de la Unidad Democrática (MUD), catalogada así por ellos mismos, tiene como centro de su estrategia electoral el hecho de que “Venezuela reclama Unidad”, columna vertebral sobre la que construyen sus discursos, mensajes y eslogans de campaña para tratar de captar la simpatía de los electores quienes no comulgan con el Gobierno Bolivariano dirigido por el Presidente Hugo Chávez.

Esta interpretación distorsionada de la realidad venezolana es evidentemente errónea por lo siguiente:

1.- Como estructura organizativa la mayor debilidad que muestra el sector de oposición es la atomización de intereses, por consiguiente, quienes en verdad reclaman y necesitan de la “unidad” son los mismos simpatizantes y líderes de la oposición, no el país nacional en su conjunto.
2.- La Unidad como concepto y eje de campaña política no garantiza nada al elector respecto a sus necesidades más prioritarias.
3.- Enfocar los esfuerzos en demostrar lo “unidos que estamos” tiene como único target al sector que simpatiza con la oposición, no al sector simpatizante con Chávez.
4.- La oposición batalla internamente y lo muestra ante el país. Su principal problema es la “unidad” y por eso enfocan su accionar en parecer lo contrario.
5.- La MUD busca ganar credibilidad simnulando que “trabajan unidos” como un supuesto equipo. La imagen proyectada es la siguiente “si sufren, discuten, pelean, traicionan, acuerdan, venden y compran cuotas de poder, se cuadran entre cogollos, etc sólo para poder llegar a un acuerdo unitario, ¿Cómo pretenden hacer creer que están preparados para gobernar a Venezuela?”
6.- En su portal de internet la MUD afirma “El pueblo venezolano está cansado de que lo dividan artificial e interesadamente. La unidad es la alternativa”. El esfuerzo organizativo de la MUD no se adapta a la realidad del país sino que ellos adaptan el país a la realidad de la MUD.
7.- Su línea discursiva apunta a “¡Ya basta de dividir a los venezolanos!”, situación política que, según ellos, tiene su origen en el accionar de Hugo Chávez. Entonces, surgen las contradicciones e incongruencias: Si Chávez es el culpable de la división del país y ese es el principal mal de Venezuela, ¿por qué la oposición nunca ha demostrado su capacidad de unirse y hacer lo opuesto a Chávez?, ¿La oposición no es capaz de hacer consigo misma lo que critíca y señala como principal error de su adversario?
8.- Venezuela está dividida en clases sociales y esto no es producto de Chávez, entonces, la Unidad como concepto socio-político sólo intenta obviar esta realidad. Para ellos no hay necesitados, no hay pobres, no hay desvalidos ni mucho menos excluídos. El mismo concepto de Unidad intenta idealizar algo inmaterializable. Es una interpretación burgués del país en su conjunto.

Como bien se muestra acá, el concepto de campaña de la MUD empezó mal. Su mayor debilidad es la misma circunstancia que atribuyen al país y cuyo origen recae, según su punto de vista, en su contrincante. Ausencia total de reflexión y uso de mercadotecnia política para mostrar lo que no es.

Complementando esta equívoca conceptualización propagandística tenemos el hecho de que la MUD está presidida y es dirigida por una élite de los “más capaces” que incluye: profesionales con extensa preparación y arraigo en Estados Unidos, miembros de gobiernos de la IV República, miembros del Consejo Editorial de El Nacional, fundadores de Gente del Petróleo, asalariados de la OEA como observadores electorales a nivel internacional, asesores de imagen de los presidentes de Fedecámaras y principales gremios empresariales, consultores de empresas privadas, etc., si dudan de ello sólo denle una visita a la página web www.unidadvenezuela.org y verán quienes están detrás de esta organización.

La élite gobierna para la élite. Los “más capaces” siempre querrán hacer esa distinción. Los que se creen por encima de los demás, jamás podrán hacer creer que ellos “aman” unirse con los “menos capaces”. Por eso su concepto de campaña, su estrategia política y su accionar social no se puede disimular. Ellos son así, es su naturaleza y evidencian una total falta de empatía respecto al Pueblo venezolano. El cinismo que para muchos muestran, no es sino naturalidad y espontaneidad ante su modelo de vida, su visión de país, su interpretación de la realidad. Estados Unidos, claro está, no necesita hacer el mayor esfuerzo para mover los hilos en función de sus intereses. La simpatía con el imperio es evidente.

Los discurso de la MUD los elabora un equipo de asesores encabezados por Pedro Nikken, quien fuese años atrás Presidente de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos y hoy por hoy es uno de los más acaudalados abogados de Caracas, por eso la línea discursiva de la MUD sigue girando sobre los temas de: concentración de poder o autoritarismo, asfisxia de la sociedad o totalitarismo, ausencia total de democracia y del Estado de Derecho. Nuevamente se explica el por qué la MUD adapta el país a su percepción sesgada de la realidad y no acopla su discurso ni estrategia al sentir real del Pueblo.

Como parte de este análisis sobre la directiva de la MUD, que de paso no fueron electos democráticamente, hay que incorporar el hecho de su íntima relación con Partidos tradicionales como AD y COPEI. Vínculos ideológicos que no se rompen al pasar de los años y que afloraron con el último show mediático por el entierro de CAP al cual invitaron y asistieron justificándolo así “como un reconocimiento a la propia figura y trayectoria del fallecido. Dos veces Presidente de Venezuela por el voto de sus conciudadanos y un líder democrático de indiscutible impacto en nuestra historia y arraigo en nuestro pueblo. Y en hora decisiva, un gobernante que respetó la Constitución, defendió la descentralización y la separación de poderes y acató el resultado de la actuación independiente del Ministerio Público y la Corte Suprema de Justicia, que lo condenó y le costó la Presidencia y la libertad, lo cual afrontó con valor y dignidad. Y en una historia como la nuestra, eso no puede ignorarse.” Más de lo mismo a mi parecer. Siguen obviando la historia reciente con la mirada en un futuro irreal, falso.

Este es el perfil de la MUD. El perfil de la organización que pretende “garantizar el cambio”, un cambio que más bien parece regreso al pasado o vuelta a lo anterior. Nada nuevo.

La misma MUD ahora se enfrentará al conclave de Gobernadores “democráticos”, los de oposición. Instancia que tiene previsto reunirse cada 15 días y que fijará tendencia y orientación política en el sector opositor. Nuevamente se desplazan y luchan por cuotas de poder entre ellos mismos. Seguiremos viendo arañazos en el saco de los “más capaces”.

Podrán ser los "más capaces" y mejor preparados, pero no los más inteligentes ni desinteresados.

jueves, 6 de octubre de 2011

CAP capa capacidad evolutiva de la oposición

¿Usted le daría su país a alguien con estos ojos de vivaracho?

La estrategia de campaña política que la oposición venezolana ha emprendido antes y desde la llegada del cuerpo de Carlos Andrés Pérez a Venezuela es una muestra más de la dirección política y visión de país que ellos representan. Lo de ellos no es futuro, no es reflexión, no es crítica ni mucho menos razón. La oposición se ha enfrascado durante los últimos tres días en una campaña desatanizadora de la IV República. Para ellos todo tiempo pasado fue mejor. Para ellos no hubo errores. Para ellos Venezuela, hoy por hoy, es la muestra más clara del neandertalismo democrático que privilegia la barbarie en contraste con el porvenir patrio, los estándares de vida altos y el bienestar colectivo vivido en los gobiernos anteriores a Chávez.

El colmo de los colmos es que nos restriegan en la cara el supuesto respeto permanente a los Derechos Humanos de los que ellos siempre hicieron gala. La masacre de El Amparo o Masacre de la Colorada, la masacre de Cantaura, la orden de “disparen primero y averiguen después”, la Doctrina de Seguridad Nacional inoculada por EEUU en la Dirección General de Policía (DIGEPOL), en el Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (SIFA) y posteriormente en la Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (DISIP), las desapariciones, torturas y demás sólo forman parte del imaginario popular. Ahora resulta que las víctimas del Caracazo no tienen ningún tipo de vinculación con Carlos Andrés Pérez, con Acción Democrática (AD), con la democracia bipartidista ni con el sistema rancio, obsoleto y represor de la democracia representativa cuartorrepublicana. Cuando omisiones vemos, corazones y mentes sabemos.

Esta bulla, ruido, propaganda, ensalzamiento, y rememoramiento positivo parcializado en torno a la figura del difunto y “mártir” CAP es otra prueba más de la involución de la oposición. Apelan a la retórica politiquera para tratar de borrar de la memoria del venezolano una etapa sangrienta de nuestra historia reciente. Recurren a la omisión desproporcionada de los hechos pasados intentando generar una matriz de opinión favorable a sus intereses políticos.Intentan crear nuevas huellas y concepciones históricas en la mente de los desprevenidos acólitos que asumen como verdad la propaganda distorsionadora de la que son víctimas. Por eso se ve a jóvenes, ignorantes y alienados, defendiendo con garra la tradición “democrática” de AD. Por eso vemos a estudiantes, que no estudian, luchar por la restauración de los excelentes regímenes políticos que había antes de Chávez. La ignorancia si es atrevida, es lo único que se podría sacar de estas acciones.

Políticamente la oposición sigue anclada en el pasado y por ello su muestra desenfadada de afecto y arraigo ante lo viejo, lo obsoleto y rancio de la política venezolana de finales del siglo XX. Esta estrategia de presentar a la Cuarta República como el ave Fénix que resurge de las cenizas para ocupar el rol principal en la escena de una MU$ dividida, sólo impone un criterio y una idea: con lo viejo y rancio todo, con lo fresco y nuevo nada. Es decir, no importa la imagen que se proyecte a través de la campaña porque nuestro candidato podrá ser Henrique Capriles o Pablo Pérez, pero la esencia de nuestro accionar es volver al pasado. El retorno de “nuestra” democracia es el fin último. Obviar al Pueblo consciente que reclama su protagonismo y participación en el modelo de la Venezuela Bolivariana el requisito obligado de nuestro programa de gobierno. ¿Para qué Revolución si nosotros lo podemos hacer muy bien con la Involución?

¡Dios Salve a CAP!

 Vómito Adeco: "Dios salve a CAP" (1975)

lunes, 19 de septiembre de 2011

Escenario electoral 2012 – Hugo Chávez Frías

El Presidente Chávez, a pesar de su enfermedad, no pierde su carisma

Falta un poco más de un año para las elecciones presidenciales de 2012 en las que el actual Presidente de la República, Hugo Chávez Frías, competirá para ser reelecto por segunda vez manteniendo, hoy en día, una popularidad similar a la registrada en los pasados comicios de 2006 en los que venció por un holgado margen de 25.94%, (62.84% Hugo Chávez, 36.9% Manuel Rosales) al finalizar el conteo de votos. Pero como sabemos, antes de las elecciones del 2006 hubo también dos eventos electorales en los que Chávez puso en juego el cargo de Presidente, veamos los números a través de cada evento:

Hacer click en la imagen para ampliar
 
El cuadro anterior nos revela algo que no ha sido dicho a nivel mediático nacional o internacional por los “cesudos” analistas estadísticos directores de empresas encuestadoras que con ínfulas de Beremiz Samir “El hombre que calculaba”, intentan brindar una visión verídica del escenario político venezolano. Pues bien, ninguno de ellos le ha dicho a la opinión pública lo que revela el cuadro anterior:

El Presidente Chávez, como candidato presidencial, ha incrementado progresivamente el porcentaje de votos que le han permitido ganar de manera aplastante los tres últimos comicios electorales. En contraparte, el candidato de la “Unidad” opositor en cada elección para Presidente realizada muestra una pérdida sostenida de apoyo en el porcentaje total de votos”

En términos coloquiales lo anterior quiere decir que en cada elección presidencial Chávez crece como la espuma mientras que el candidato opositor de la “unidad” va pa´lo abajo. Esto nos lleva a la siguiente interrogante ,¿por qué?

Mucho se podría especular sobre las razones para que esta brecha entre el apoyo a Chávez y al candidato “unidad” opositor se vaya ensanchando. Me atrevería a afirmar que, poco a poco, un porcentaje del sector opositor ha “entrado en razón” cambiando de preferencia política luego de tantas decepciones con un sector opositor sin liderazgo, sin credibilidad, sin amor patrio y, sobre todo sin razón. Es que una propaganda política sostenida durante años, fundamentada en miedos fantasiosos y apelando más a la emoción que a la lógica no puede mantenerse creíble por siempre pero en fin, de lo incongruente y disociado de los asesores de la oposición, su estrategia de campaña y demás tocaré en otro próximo artículo.

Del otro lado, el candidato por la reelección, Hugo Chávez Frías, tiene gran cantidad de elementos a su favor de entre los que destacan:
  • Nunca ha perdido una elección presidencial y los totales de votos que respaldan su candidatura han venido en ascenso constante y notable desde 1998.
  • Un liderazgo único, unitario y claramente definido. No hay nadie visible peleándose el liderazgo con él.
  • Las cifras actuales en todos los sondeos de opinión le dan una preferencia en el electorado aproximada al 60%, número casualmente similar a los porcentajes de votos obtenidos durante las pasadas elecciones presidenciales.
  • Proyecto de Gobierno y Proyecto de país definido. El Socialismo Bolivariano está posicionado como idea política en la mente de los simpatizantes de Chávez que, aunque no sepan a ciencia cierta qué significa, lo ven como meta u horizonte posible. Ideas como Bien Común, Buen Vivir, Vivir Viviendo han calado en la conciencia y lenguaje cotidiano del venezolano. Se han creado espectativas que se están satisfaciendo.
  • Carisma indiscutible del líder e identificación (empatía) con el Pueblo o electorado. Liderazgo auténtico y espontáneo.
  • Convalecencia del líder ha permitido posicionarlo como un “ser humano” desmitificando la propaganda opositora que lo cataloga como un ser cruel y sin sentimientos. La coyuntura generada por causa de la enfermedad y su tratamiento ha estrechado el vínculo emocional de amor con el Pueblo que lo apoya y genera consideración y compasión en aquellos que pudiesen catalogarse como indecisos electoralmente hablando. Lealtad electoral que se fortalece.
  • Maquinaria electoral que se ha mostrado victoriosa y aplastante en elecciones nacionales. Organización partidista articulada única con más de 30% de aceptación entre el electorado venezolano y más de 7 millones de militantes inscritos (votos duros que espantan y preocupan de manera frustrante a la oposición).
  • Eslogan principal de campaña ya definido “Misión 7 de Octubre” junto a una maquinaria de agitación y propaganda disciplinada con una línea estratégica definida. Falta aún definir la táctica comunicacional y de campaña.
  • Gestión de Gobierno que incide directamente en los principales problemas del ciudadano común. Si bien la gente reconoce que hay problemas significativos como inseguridad y electricidad, también admiten que se están tomando medidas y se trabaja para amilanar su repercusión negativa y solventarlos.
  • Ofertas como la Misión Vivienda Venezuela que “amarra” el voto al garantizar, y dar muestra con hechos, que el déficit de vivienda será solventado a corto y mediano plazo. La constante entrega de viviendas es muestra de ello junto con testimonios reales.
  • Mejora en la calidad de vida de sectores populares y clase media con desarrollo y refacción de la vialidad, autoconstrucción de viviendas, centros de salud gratuitos, computadores Canaima para niños y jóvenes estudiantes, vehículos con precios accesibles para la clase media, ascensores gratuitos para beneficiar a súper bloques como los del 23 de enero, programas como mi Casa Bien Equipada, Mercales, Pdvales, Abastos Bicentenarios, ferias de útiles escolares, Areperas socialistas Venezuela, productos de consumo diario a precios accesibles como Café Venezuela, Harina de Maíz Venezuela Socialista, lácteos Los Andes, Aceites Diana, ayudas económicas a familias damnificadas por las lluvas, refugios para los damnificados, Una Gota de Amor para mi Escuela, Misión Madres del Barrio, Futura Misión Saber y Trabajo, Misión Negra Hipólita, etc.
  • Justicia Social puesta de manifiesto con expropiación y luego adjudicación de inmuebles en manos de estafadores, puesta en vigencia de la Ley de Inquilinato, puesta en Vigencia de la Ley del Deporte, resguardo y protección a ahorristas de entidades bancarias en quiebra por estafas, etc.
  • Ataque frontal contra la Inseguridad a través de la Policía Nacional Bolivariana y la ampliación de su cobertura a otros estados del país además de la región capital por medio de la articulación coordinada con policías regionales, Policía Comunal y otros. Política de desarme.
  • Solución a corto plazo de los problemas del Metro de Caracas.
  • Inversión sostenida para el incremento del potencial eléctrico del país junto a la política de ahorro energético que invita a los ciudadanos a hacer un uso racional y austero de la electricidad.
  • Intervención de Hospitales y centros de salud que Gobernadores de oposición, distraídos por sus ambiciones presidenciales, han dejado en el abandono cediendo el espacio para que el Gobierno Nacional de respuesta oportuna a las necesidades de la colectividad. Esto capitalizará votos a favor del Presidente de la República.
  • Desarrollo de la conciencia nacional y del sentir patrio a través del apoyo contundente brindado al sector deportivo y los logros obtenidos a nivel internacional.
  • Nacionalismo al repatriar oro enviado al extranjero por gobiernos anteriores. Mala imagen proyectada por la oposición al cuestionar esta medida.
  • Plataforma mediática del Sistema Nacional de Medios Públicos que brinda difusión de la gestión de gobierno y proyecta una imagen uniforme, cercana, tangible y real del candidato-Pueblo.
  • Guerrilla comunicacional articulada en internet. Apoyo de seguidores del Pdte. Chávez en el cyberespacio continúa en constante aumento.
  • Gestión en marcha, propósito de gobierno conocido. Hechos reales y tangibles que soportan a la imagen del líder.
Todos los elementos mencionados le suman puntos a la precampaña del candidato Chávez, aspectos que fortalecen su proyección hacia la reelección. Lo más importante acá, y eso ocasiona los benditos dolores de cabeza de los asesores de la oposición, es que Hugo Chávez como figura política no sólo se diferencia y ha posicionado en las mentes de los electores. Hoy en día Chávez como candidato ha logrado lo que ningún líder de la oposición posee: estigmatización e improntación. Estigmatización porque no sólo se diferencia del resto de los competidores sino que se distingue, sobresale y es reconocido como mejor que el resto e Improntación porque ha dejado huella y se arraiga no sólo en la mente o parte racional del votante, sino en la conciencia y el corazón del universo de electores.

Muchos dirán que todo este “optimista” panorama es ficticio y que el candidato rojo no ha captado votos o afinidades partidistas, argumento que se puede diluir tan sólo al revisar la popularidad de los principales protagonistas políticos a nivel nacional. Hugo Chávez está en el Gobierno, está ejerciendo el cargo de Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela y su gestión es tangible y palpable. Los miedos infundidos por la propaganda sistemática de la oposición han ido desapareciendo progresivamente, ya no tienen el mismo impacto que antes, la gente ya está acostumbrada o inmunizada y eso, poco a poco, se ve en los resultados electorales. La conciencia política del venezolano ha madurado.

¿La diferencia entre los procesos electorales anteriores y el de 2012? quizá la enfermedad del candidato que lo condiciona a evaluar, diseñar y ejecutar nuevas formas de hacer campaña y pensar más en el apoyo que le pueda dar su equipo. Eso lo hemos visto a diario con un tren Ministerial activo en plena movilización. El despliegue de nuevos liderazgos que son leales al líder y fungen como extensiones de su conciencia, de su espíritu y de su accionar para y con el Pueblo.

Aunado a esto, las mayores crisis de servicios vividas en revolución han tenido su cenit durante los dos últimos años: electricidad, agua, inseguridad y vivienda. Todos los planes, políticas, Misiones y acciones implementadas desde entonces arrojan indicadores positivos apuntando a una solución sostenida y persistente. Es por eso que Chávez, asombrosamente para algunos sigue teniendo 60% de popularidad.

Existe confianza respecto al líder a quien se le ve trabajando día y noche por quienes lo eligieron, el Pueblo. Por eso son las “benditas cadenas” que la oposición detesta, ellos saben que Chávez al hacerlo establece una cadena irrompible con la psiquis del espectador u oyente. No importa cuanto deba esperar un damnificado por su vivienda, él o ella tienen la esperanza intacta y la fe inquebrantable desde el momento en que vieron a alguien en la misma situación recibir la llave de su casa o apartamento. ¿Por quién creen ustedes que votarán aquellos damnificados, o los que viven arrimados en casa de sus familiares o pagando un alquiler devorador?. Es algo que va más allá de la lógica y la razón. Es algo emocional, sentimental y hasta espiritual que el mercadeo político no puede comprar. Chávez, tarde o temprano cumple. Él lo sabe y lo ha expresado “más allá de la esperanza, existe una realidad”, y es allí en donde centra todo su accionar: cambiar la realidad de aquellos que lo eligieron transformando la esperanza en hechos.

Tenemos de un lado a un candidato que me muestra en la realidad no sólo las ofertas sino las promesas que está cumpliendo contra viento y marea, y del otro lado vemos a un saco de gatos cuya mayor promesa electoral, por ahora, es garantizar la “unidad” de ellos mismos. ¿Paradójico, no?

Esperaremos hasta ver la manera en que se definirá la táctica comunicacional del PSUV. Veremos innovación en campaña política cybernética. La Guerrilla comunicacional tendrá parte de la responsabilidad para neutralizar al enemigo y conquistar el espacio virtual. El próximo 7 de octubre, octubre “rojo” como ya he escuchado y leído por allí emulando a la Revolución Bolchevique de 1917, será decisivo para continuar el camino iniciado en el 98. Camino que creo, según mi humilde punto de vista, tendrá la misma tendencia que hemos venido observando: ensanchamiento de la brecha porcentual de votos entre aprobación al Pdte Chávez y rechazo al candidato de Unidad de la oposición. Surge entonces otra pregunta: ¿Para qué la oposición arma todo este parapeto si sabe que perderá de calle?, la respuesta en el próximo análisis del escenario electoral 2012 – Mesa de la Unidad y candidatura unitaria.